Bangkok
Ayer estuve en el Bosque Inundado. Cuando entré, cuando cerré la puerta detrás mío, tuve una sensación de lo más extraña: su olor, su calor, la humedad... me transportaron de nuevo a Bangkok, al momento exacto en que salí del aeropuerto, en que su clima me golpeó en la cara.
Ahora sólo pienso en volver...
No hay comentarios:
Publicar un comentario