El Perro Mongol, II
Estaban haciendo el amor. De pronto él la miró, interrogante. Bosque temblaba.
"No."Él se apartó, suavemente, y se derramó en la alfombra. Y ella se echó a llorar.
Bosque acababa de renunciar -quizá- a lo que más deseó en esta vida. Cazar al perro. Al Perro Mongol.
9 comentarios:
Que triste y bello, el corazón es el organo mas complejo del ser humano.
El corazón tiene razones que la razón no alcanza a comprender.
Quién sabe qué se le pasó por la mente en esas milésimas de segundo.
Alguna razón habrá, siempre la hay, no?
Pero es que, como les dije a mis amigas este finde, nooooo empieeeeces por el seeexo. Hay que hacerse esperar un poco doña Bosque. Ellos suelen tener más ganas por lo que les resulta más dificil conseguir.
X-D
Cosichka, ¿quién te dice a tí que empezó por el sexo? ;)
Cosichka, esperen o no, las ganas se les van a ir de todas formas (risas) ;-)
No será que al final, cuando ya lo tenía ahí a tiro de piedra.. se dio cuenta de que no se conformaba con eso de amar sin ser correspondida???
Es lo que suele pasar, si no, estoy de acuerdo con Susana, espero que fuera ella la que dijo, ¡¡hasta aquí hemos llegado!!
Besitos.
Pues yo creo que efectivamente, eso podía significar renunciar a cazar al Perro Mongol... ojo, ojo...
Ahí está. No renuncia al perro. Renuncia a CAZARLO.
¿Quién puede (o tiene derecho de) atrapar un alma libre? ¿Con qué fin? ¿El de retenerla sin más? ¿Se puede utilizar a un hijo para obligar a una persona a permanecer a tu lado? Yo creo que no.
Yo veo un sacrificio por parte de Bosque. Y un acto muy grande de amor y respeto hacia su compañero de aventuras que, como sabemos, es libre y vuela por naturaleza.
..y como sabemos también ni se sacrifica, ni respeta, ni siente el mismo amor por Bosque. Creo que es lo mejor que puede hacer, no querer tener o retener algo que nunca le va a llenar como ella desea y/o se merece.
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